Las Cenas de la Esperanza, organizadas por la Oficina de Vinculación de Graduados UCA, se convirtió en un emotivo reencuentro para los profesionales que ingresaron en los años de 1979, 1984 y 1989. Estos eventos, que celebraron los 45, 40 y 35 años de pertenencia a la familia UCA, respectivamente, permitieron a los profesionales recordar su paso por las aulas y revivir momentos significativos de su vida universitaria. Cada cena inició con una misa de acción de gracias en la Capilla Jesucristo Liberador, seguida de una sesión de fotos en la Biblioteca P. Florentino Idoate o en el Mural de los Mártires, un brindis por su desarrollo profesional y una cena que les permitió compartir anécdotas de su paso por las aulas universitarias.
Cada una de estas celebraciones ofreció un espacio propicio para revivir recuerdos y reconectar con antiguos compañeros. Los asistentes compartieron sus memorias en el Edificio Francisco Andrés Escobar, donde revivieron los momentos de su formación y estrecharon lazos con antiguos compañeros. Estas reuniones subrayan la importancia de los lazos forjados durante la etapa universitaria y la influencia perdurable de la UCA en sus vidas personales y profesionales. Además, de instar a los graduados y graduadas a incluirse en eventos y actividades futuras, fortaleciendo así la continuidad y el vínculo con su alma mater.
Estas cenas no sólo ofrecieron un espacio para recordar, sino también para fortalecer la identidad y el sentido de comunidad entre los exalumnos. La UCA, a través de estos encuentros, reafirma su compromiso con sus profesionales, brindándoles una oportunidad para reflexionar sobre su trayectoria y los logros alcanzados desde su paso por la universidad, en un ambiente de gratitud y compañerismo. La Cena de la Esperanza es a beneficio del Programa de Becas Gondra, que actualmente apoya a 747 estudiantes, de los cuales 73 son apadrinados por la comunidad de graduados, quienes participan en actividades como estas, entre otras que se realizan durante el año.