“No es necesario ser un CUM Laude para alcanzar una beca”

 ¿De dónde nace tu pasión por la informática y por qué estudiar en la UCA?

En mi familia está muy claro lo de la UCA, porque mi papá es graduado de la Universidad, también, de Licenciatura en Ciencias de la Computación. Entonces, al tener a mi papá como background sobre computación, fue muy sencillo ver el potencial que tenía la carrera. No era que me enseñara computación en la casa, sino ver la lógica que podía plantear en una máquina para que siguiera instrucciones…

¿Además del ejemplo de tu papá, cuál era tu motivación?

Desde los 12 años jugué de manera profesional ajedrez. Esto influyó grandemente en muchas decisiones, incluso a la hora de decidir mi tema de doctorado. Desde adolescente, analizaba las partidas con un software, observaba cómo el programa se anticipaba a las jugadas y valoraba los movimientos sin saber los conceptos que nosotros manejamos como humanos, siempre me interesó el software que estaba detrás de este análisis. Fue más de una década de ajedrez.

¿Cuál fue tu primera impresión cuando recibiste tu primera materia en la UCA?

Cuando entré por primera vez a una (aula) Magna, se sintió espléndido, esa sensación de ser universitario, de dejar el colegio. Mis primeras materias fueron Introducción a la Programación y Matemática I. Recuerdo mucho a Alfonso Abarca, quien me enseñó a estructurar el pensamiento cuando se está programando, pues no es solo instrucción como lluvia de ideas hacia la computadora, no. Es pensar sistemáticamente, programación, objetos; profundizar mucho a la hora de programar y también hacer las cosas escalables y bien sistemáticas.

Háblanos de tus experiencias laborales, ¿cómo un graduado de la Licenciatura en Ciencias de la Computación de la UCA logra convertirte en Applied Scientist en Alexa AI?

Todo comenzó en El Salvador, desde el tercer año tuve la oportunidad de formar parte del equipo de programadores de Avianca y luego fui desarrollador de videojuegos en una empresa en el país, pero con sede en San Francisco, Beyond Games. Esta fue de las mejores experiencias, trabajé en esta empresa hasta terminar mi carrera, seguí seis meses después, luego encontré una oportunidad para estudiar el doctorado en Estados Unidos.

Antes de hablar de Alexa y Amazon, ¿cómo es que llegas a estudiar directamente un Doctorado en Ciencias de la Computación en Estados Unidos?

A punto de graduarme, yo quería hacer algo como una especia de home automation, incluso logré un prototipo que al aplaudir se encendía o se apagaban las luces. Pero pensé, sería bueno que se activara con la voz. Cuando entré a ver a detalle lo que esto implicaba, descubrí que era un mundo inmenso, nos referimos a NLP (Nature Language Processing), me di cuenta de que eso era lo que quería hacer.

¿Cómo encuentras la beca?

Me di cuenta de este programa a través de mi esposa, que en aquel tiempo era mi novia. A ella la conocí en un torneo de ajedrez cuando aún estudiaba la carrera, en la UCA. Al graduarme, me explicó sobre este tipo de becas, otorgadas directamente por las universidades, en mi caso, la Universidad de Houston. Ellos te financian los estudios y a cambio publican investigaciones científicas que preparas cuando estás desarrollando tu tesis, la universidad aumenta su prestigio y uno se desarrolla más en el área, es un ganar, ganar. A diferencia de otras becas que lo obligan a regresar a su país de origen, este programa funciona de manera diferente. Si me permites, quisiera decir que muchas de estas becas se pierden para países como los de Centro América porque, en ocasiones, se tiene la mentalidad que solo los mejores, académicamente, pueden ganar un beca; en cambio, estudiantes de otras nacionalidades, desde secundaria hablan acerca de la universidad a la que van a ir, sin importar si son o no el mejor de la clase, es algo que ya tienen en su mente.

Luego de tu recorrido académico, cuéntanos ¿cómo es que entras a Amazon?

En 2018, tuve mi primer internship con Amazon. Viajé a Boston, y luego de pasar todos los filtros, entré al equipo de Alexa Speech AI, comencé a ver el enfoque de la acústica de los clientes cuando hablan con Alexa, cuando te expresas, muestras enojo, alegría, suspenso, emociones de todo tipo. Entonces, todo ese análisis yo lo combiné a nivel de emociones, con texto. Se toma lo que dices y cómo lo dices. Hay personas que, con admiración, nos manifestaban ¡Oh my God, era más importante la manera, el tono, en que lo decía que el texto en sí! A partir de estas experiencias, publiqué un artículo de investigación donde exponía un modelo donde se mezclaba la acústica y las emociones para que Alexa identificará el sentimiento de las personas. Este se convirtió en una de mis primeras patentes, el 17 de mayo de este año (2022) se publicó y lo están ocupando en Amazon. Es bien satisfactorio definitivamente.

¿Qué le dirías a un estudiante de nuevo ingreso?

La UCA me enseñó autosuficiencia, no todo lo veremos en clase, es demasiado, por ello no podemos decir que las clases son suficientes. Entonces, la universidad nos enseña a aprender a indagar lo que nos gusta. Alfonso Abarca nos decía, que somos capaces en un fin de semana de leer algo nuevo sobre lenguajes de programación o computación, y aunque en dos días no nos volvamos expertos, ya tendremos conocimientos sobre algo nuevo, la UCA nos enseña a salir de nuestro “comfort zone” para poder indagar en campos y áreas más específicas.