Año 18

número 787

diciembre 17

1997

ISSN 0259-9864

Editorial ¿Hacia dónde va el FMLN?

Opinión Pública Los salvadoreños evalúan el año 97

Derechos Humanos Un feliz encuentro

Sociedad Los aparatos ideológicos de la transnacionalización

Documento Estatutos del FMLN y propuestas de reforma (II)




¿Hacia dónde va el FMLN?

Sin duda alguna, el FMLN es la segunda fuerza política del país, y no sólo eso: las posibilidades de que se convierta en la primera no pueden desestimarse. Pero, para ello, el partido de izquierda debe ser visto por la sociedad civil como una institución no sólo capaz de gestionar el gobierno, sino de hacerlo sin llevar al país por el despeñadero de la confrontación política. Ambas cosas son difíciles de lograr. La primera, más de competencia interna del FMLN, requiere tanto de planes de conducción gubernamental claramente concebidos (y realizables) como de los agentes con las capacidades profesionales para implementarlos. Hasta el momento, el FMLN no ha dado señales claras de poder cumplir con esos requisitos, o incluso de que en el futuro próximo --digamos cuando le llegue (si es que le llega) el turno de gestionar el aparato de gobierno-- pueda hacerlo. Lo segundo no sólo involucra al FMLN, que debe ser creativo y abierto a la hora de acercarse a otros sectores sociales y económicos que no son ni militantes ni simpatizantes suyos, sino precisamente a estos últimos, entre quienes se encuentran individuos y grupos que, si llegaran a ser (o a sentirse) afectados por un gobierno de izquierda, seguramente no descartarían actitudes y prácticas confrontativas para hacerle resistencia.

No va a ser fácil para el FMLN, si llegara a gestionar el aparato de gobierno, acercarse, por ejemplo, a los grupos empresariales más poderosos si su propósito es obtener de éstos parte de sus beneficios económicos para promover una mayor equidad en El Salvador. Ni tampoco será fácil para los empresarios ceder, aunque sea mínimamente, en un punto tan sensible para ellos, especialmente si perciben (o creen percibir) en medidas de esa naturaleza un plan encaminado a terminar con la propiedad privada. Los viejos fantasmas pueden aparecer nuevamente, poniendo serias trabas a cualquier propósito de gobernar tomando en serio las necesidades de los sectores mayoritarios del país. Readecuación institucional hacia adentro --con los necesarios ajustes ideológicos y políticos-- y acercamiento creativo hacia los sectores sociales, políticos y económicos que no le son afines: estos son dos de los retos que el FMLN debe encarar si quiere fundar sus pretensiones de gobernar sobre asideros sólidos. Por ser ambas cosas sumamente difíciles, el FMLN debió haberse puesto a trabajar en serio en ellas desde tiempo atrás, al margen o con relativa independencia de las exigencias electorales.

La reciente Convención Nacional ha sido tomada con optimismo por varios analistas políticos del país. Pareciera que, así como Alfredo Cristiani está llamado a "salvar" a ARENA de la crisis institucional por la atraviesa, Facundo Guardado va a "salvar" al FMLN de la ortodoxia ideológica y de la política de principios que impiden la apertura hacia los sectores sociales que no son considerados de izquierda. Dejando de lado lo absurda que es la idea de "salvadores" en política -sobre todo, porque una institución partidaria debe tener los mecanismos para renovarse institucionalmente y no mesiánicamente--, se puede entender que la élite arenera haya decidido apostarle una vez más a Cristiani, puesto que en las filas de la derecha el presidente del COENA es una figura política y económica de altos vuelos. No se entienden del todo, por otro lado, las razones que posibilitaron el ascenso de Guardado a la Coordinación del FMLN. Si bien es cierto que fue un comandante guerrillero, sus dotes de estratega militar no fueron particularmente publicitadas --como lo fueron, por ejemplo, las de Joaquín Villalobos ( "Atilio")--, tampoco han sido llamativas la fuerza de su personalidad o su contundencia argumentativa política e ideológica -como lo fueron, por ejemplo, en Cayetano Carpio ("Marcial"). ¿Qué es, entonces, lo que ha posibilitado su ascenso a la jefatura del FMLN?

Se ha hablado del predominio de una corriente moderada al interior del partido de izquierda, de la cual justamente Guardado sería expresión. Puede ser. También se ha hablado de la capacidad de éste para movilizar a sus incondicionales --un grupo reducido de cuadros del Frente, pero muy hábil políticamente-- para contrarrestar la fuerza de las demás "tendencias" al interior del partido. Ambas cosas, por cierto, no son excluyentes, pero la primera carga más las tintas sobre lo positivo del cambio en las filas efemelenistas --respondiendo, como dice un reconocido analista político, a lo que la gente quiere--, mientras que la segunda acentúa más las dotes conspirativas de Guardado para desplazar a las figuras duras del FMLN. Lo primero, por supuesto, genera simpatías, pues quién a estas alturas va a estar en contra de la moderación; lo segundo, lejos de resultar simpático, puede generar desconfianza en alguien que, sin parecerlo, ha resultado ser más listo que los viejos zorros de la izquierda. Incluso la bandera de la moderación pudiera ser nada más un recurso hábilmente usado para apuntalar las propias ambiciones personales en desmedro de las ambiciones de los que han sido relegados.

En la peor de las posibilidades, el cambio en el liderazgo del FMLN no sería expresión de lo que la gente quiere, sino de lo que quieren Facundo Guardado y sus seguidores, lo cual bien pudiera ser conseguir lo que tantos políticos ambicionan por encima de cualquier otra consideración: poder y privilegios. Si asumimos, también en la peor de las posibilidades, que la ambición de los excluidos --aunque esté revestida de los ropajes ideológicos más puros y nobles-- es la misma, entonces lo que se vislumbra para el futuro próximo en la vida interna del FMLN es una lucha enconada entre las fracciones rivales por desplazarse recíprocamente. Eso se podrá presentar como la intolerancia de los unos contra la pluralidad de los otros; o el pragmatismo de los segundos contra la fidelidad a los principios de los primeros, pero unos y otros no tendrán escrúpulos para denostar a los "compañeros" y "camaradas".

¿Escenario pesimista? Sí. ¿Escenario improbable? No. Comoquiera que sea, la dinámica interna del FMLN no debería ser tomada con excesivo optimismo, pues la "carita alegre del niño Facundo", "la carita triste del niño Leonel", la carita refunfuñona del niño Schafik o "la carita de beatito del niño Dagoberto" pueden hacer olvidar que todos ellos son hombres no sólo fogueados en el arte de destruir al enemigo, sino capaces de dar a su lucha el carácter de una cruzada.



Los salvadoreños evalúan el año 97

Un poco más de la tercera parte de la población, el 38.2 por ciento, piensa que a finales de 1997, el principal problema del país continúa siendo la delincuencia según revela el último sondeo del Instituto Universitario de Opinión Pública (IUDOP) de la Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas" (UCA) de El Salvador. La encuesta, efectuada entre el 29 de noviembre y el 7 de diciembre del corriente año, con una muestra nacional de 1,217 adultos de zonas urbanas y rurales de los catorce departamentos de la república, con el objeto de conocer la evaluación que los salvadoreños hacen sobre el año político de 1997, revela también que los ciudadanos siguen estando preocupados por la situación económica del país. Para el 18.7 por ciento, el principal problema fue la economía, mientras que para el 13.6 por ciento lo fue el desempleo; el 11.6 por ciento señaló a la pobreza y sólo el 5.7 por ciento destacó la inflación como problema. Estos últimos problemas de orden económico sumados llegan a constituir un porcentaje total del 49.6 por ciento, superando a la preocupación por la criminalidad.

De hecho, respecto a la situación económica, casi la mitad de los consultados, el 47.7 por ciento, piensa que la economía del país siguió igual, el 38.8 por ciento considera que empeoró y el 11.2 por ciento vio signos de mejoramiento, el resto no supo responder a la pregunta. Datos parecidos se obtuvieron cuando se consultó acerca de la economía doméstica. Sin embargo, cuando se preguntó acerca de la pobreza en el país durante 1997, el 53.1 por ciento, respondió que la pobreza ha aumentado en el presente año; el 41.9 por ciento sostuvo que los niveles de pobreza siguieron igual y sólo el 4 por ciento cree que han disminuido. Ello está relacionado con la opinión del 81.3 por ciento de ciudadanos, revelada también por la encuesta, que piensa que el sistema económico salvadoreño ha favorecido a unos pocos y no a toda la población.

Respecto a la situación de criminalidad, el 63.4 por ciento opina que la delincuencia ha aumentado durante 1997, frente a un 24.7 por ciento que considera que se ha mantenido igual que en años anteriores y un 10.8 por ciento que ha percibido una disminución en los niveles de delincuencia. En la misma línea, se preguntó a los ciudadanos salvadoreños si se ha combatido eficientemente la delincuencia , en otras palabras el nivel de impunidad que subsiste en la sociedad. Un poco más de la mitad de los consultados (51.6 por ciento) respondió que aún existe mucha impunidad en el país, en cambio una cuarta parte (el 25.8 por ciento) consideró que aún existe algo de impunidad; mientras que el 17.2 por ciento señaló que ha habido poca o ninguna impunidad en el año que termina, el resto se abstuvo de emitir su opinión.

A los ciudadanos se les preguntó directamente si habían sido víctimas de algún hecho delincuencial durante 1997. Un porcentaje significativo respondió afirmativamente: casi tres de cada diez adultos salvadoreños sufrieron un acto criminal en el lapso de un año; mientras que el resto, siete de cada diez no se vieron afectados directamente por la delincuencia.

El desempeño del gobierno

Según la encuesta, los principales logros atribuidos al gobierno por la ciudadanía son: el mejoramiento en la infraestructura del país y la educación. No obstante, un porcentaje importante de salvadoreños piensa que el gobierno no obtuvo ningún logro en 1997. En el otro lado de la moneda, los salvadoreños identificaron como fracasos del gobierno a la imposibilidad de resolver los principales problemas del país: la economía y la delincuencia, entre otros aspectos. Para el año 1997 y en una escala de 0 a 10, los salvadoreños evaluaron el desempeño del gobierno de manera general con una nota promedio de 5.18 (cinco punto dieciocho).

Opiniones diversas

El sondeo de la UCA no sólo abordó los temas relacionados con las problemáticas del país, también consultó la opinión de los salvadoreños sobre algunos de los sucesos que han impactado a la sociedad en 1997.

En primer lugar, preguntados sobre el escándalo de FINSEPRO-INSEPRO, el 45 por ciento de los ciudadanos piensa que éste fue responsabilidad del gobierno por no haber prevenido ese desfalco, el 12.5 por ciento cree que el gobierno tiene sólo un poco de culpa, mientras que 15 por ciento está convencido de que el escándalo no fue culpa del gobierno. Sobre el mismo tema, aproximadamente seis de cada diez ciudadanos piensan que la Asamblea Legislativa actuó bien al intepelar al presidente del Banco Central de Reserva; mientras que dos de esos diez piensan que actuó mal y otros dos sostienen que no actuó ni bien ni mal, ya que era su trabajo. El resto no opinó al respecto.

Sobre el tema de la Asamblea Legislativa, la tercera parte de la población opina que el parlamento está jugando un papel más importante que en el pasado, otra tercera parte cree que el papel es igual y un 14.7 por ciento considera que la Asamblea es ahora menos importante.

Otro punto abordado por el sondeo del IUDOP fue el tema de la condonación de la deuda agraria. Los resultados revelan una opinión pública muy repartida sobre este tema: la tercera parte de los ciudadanos, el 34.8 por ciento, está a favor de la condonación parcial de la deuda agraria, mientras que el 29 por ciento cree que no se debe condonar en absoluto la deuda agraria; sólo el 25.6 por ciento está a favor de una condonación total.

En otro punto, se preguntó a los ciudadanos sobre la responsabilidad de los casos de secuestro que han sido revelados recientemente. Un poco más de la mitad de los ciudadanos piensa que los secuestros son realizados por bandas conformadas tanto por ex-guerrilleros y ex-militares, como por delincuentes comunes; en cambio, el 17.3 por ciento atribuye la responsabilidad de los secuestros a delincuentes comunes, el 12.8 por ciento a ex-militares solamente y el 6.8 señala a ex-combatientes de la guerrilla. Sin embargo, preguntados directamente si los dirigentes del FMLN están implicados en los secuestros o es un manejo político de ARENA, los salvadoreños dividieron sus opiniones de la siguiente forma: el 32.8 por ciento cree que es un manejo político del partido gobernante, el 28.8 por ciento también cree lo mismo, pero además piensa que los dirigentes del FMLN están implicados; finalmente, el 21.2 por ciento considera que personajes del Frente sí están implicados.

Las opiniones políticas

La encuesta de la UCA también indagó sobre las opiniones políticas de los salvadoreños, referidas especialmente a los dos partidos más fuertes. El 53.1 por ciento de los salvadoreños piensa que la imagen de ARENA no mejoró después de su convención; un 26.9 por ciento percibe más bien que su imagen ha empeorado y sólo un 12.7 por ciento señala un mejoramiento en su estampa como partido.

En general, la opinión pública no percibe que los partidos más grandes estén muy unidos. De acuerdo a los resultados del sondeo, un poco más de la mitad de la población ve al partido ARENA poco o nada unido, mientras que el 22 por ciento advierte algún nivel de unidad y sólo el 11.3 por ciento lo califica de estar muy unificado. En el caso del FMLN, el 43.7 por ciento percibe a ese partido como poco o nada integrado, en tanto que el 24.5 por ciento lo nota algo unido y el 16.2 por ciento lo ve muy unido.

En el sondeo, se preguntó de forma abierta sobre la personalidad política que sería un "buen candidato a la presidencia de la república para 1999". Un poco más de la tercera parte de los ciudadanos no supo identificar a alguien y casi el 20 por ciento afirmó que ninguna personalidad pública le convence como candidato; pero entre quienes sí seleccionaron a un personaje, destaca Alfredo Cristiani con el 17.5 por ciento de las respuestas; le sigue Rubén Zamora con el 6.8 por ciento, Héctor Silva con 4.8 por ciento y Roberto Murray Meza con 3.4 por ciento de las menciones. Otras referencias fueron hacia Schafick Hándal, Calderón Sol y otros personajes.

Como es costumbre al cerrar el año, el IUDOP preguntó sobre las preferencias partidistas a finales de 1997. Los resultados muestran una disputa cerrada y casi exclusiva de los dos partidos mayoritarios. El 23.8 por ciento de la población votaría por ARENA si las elecciones se hubiesen realizado en los días del sondeo; mientras tanto, el FMLN acumularía un 20.2 por ciento de las intenciones de voto. El resto de partidos no llegaría ni al 5 por ciento de los votos.

Sin embargo y como dato interesante, cuando se preguntó a los ciudadanos qué partido podría ganar las elecciones presidenciales de 1999, el 38.5 por ciento mencionó al FMLN, frente a un 27.7 por ciento que señaló a ARENA; un poco más del 30 por ciento se mostró indeciso.

En resumen, la opinión sobre los problemas generales del país en 1997 no parece haber cambiado sustancialmente de los años anteriores, los salvadoreños siguen acusando los elevados niveles del crimen y la economía del país como las fuentes de preocupación nacional. Tampoco se ha modificado notablemente la opinión pública acerca de los logros y fracasos del gobierno en el año que finaliza, a excepción de la educación que cada vez parece perfilarse más como un logro del gobierno.

Sin embargo, las opiniones sobre los diversos acontecimientos de repercusión nacional se muestran muy complejas y ello sugiere un elevado nivel de debate social y de actitud crítica de los ciudadanos hacia lo que sucede en el país. Al mismo tiempo y en términos políticos, el sondeo revela un fuerte dinamismo político, un alto grado de polarización partidaria y una opinión pública muy susceptible para finales de 1997.



Un feliz encuentro

El 10 de diciembre de 1948 fue aprobada la Declaración Universal de Derechos Humanos; por eso, durante esa fecha se conmemora el acontecimiento mediante la realización de actos oficiales, marchas, conferencias y otro tipo de eventos públicos. Ello, nadie lo duda, es bueno. Pero, además, los gobiernos del mundo deberían aprovechar la ocasión --de una vez por todas-- para comenzar a preocuparse más, de verdad y con seriedad, por elevar los niveles de respeto a los mismos adoptando las medidas necesarias para reducir las graves violaciones que aún afectan a las personas, sobre todo a las más pobres, a pesar de los avances conseguidos en la materia; avances que, principalmente, han tenido lugar durante la segunda mitad del siglo que finalizará dentro de poco.

En ese marco fue que el 4, 5 y 6 de diciembre se realizó un encuentro nacional de promotoras y promotores de derechos humanos. Las instituciones organizadoras --el Consorcio de Organismos No Gubernamentales de Derechos Humanos de El Salvador y el Instituto de Derechos Humanos de la UCA-- dedicaron la actividad a la doctora Victoria Marina Velásquez de Avilés, como un reconocimiento a la ardua labor que desarrolla esta funcionaria y que, lastimosamente, en más de una ocasión le ha acarreado serias amenazas contra su vida.

Antes de entrar en materia, cabe mencionar los organismos que forman parte del citado Consorcio: la Comisión de Derechos Humanos de El Salvador (CDHES), el Centro de Promoción para los Derechos Humanos "Madeleine Lagadec", el Departamento de Derechos Humanos del Sínodo Luterano Salvadoreño y el Comité de Familiares de Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos de El Salvador (CODEFAM). Junto al IDHUCA, estos reconocidos grupos decidieron reflexionar y pensar el futuro cobijados por un lema que refleja, con suficiente claridad, sus prioridades: "Construyamos la democracia promoviendo y defendiendo nuestros derechos".

Durante sus participaciones, en la inauguración y en la clausura del evento, la señora procuradora para la defensa de los derechos humanos expresó que estaba dispuesta a seguir trabajando al frente de la institución hasta el final de su mandato, sin que nada ni nadie la hagan claudicar. Eso fue uno de los ingredientes más destacados de este encuentro donde promotores y promotoras diseminados en casi todos los departamentos del país se reunieron --por primera vez de esta manera-- para compartir sus experiencias, recibir capacitación, evaluar la situación actual de derechos humanos en El Salvador y generar propuestas.

Vale la pena señalar que, pese a las actitudes en su contra, la doctora Velásquez de Avilés ha contado y sigue contando con el reconocimiento y respaldo de muchas personas, instituciones y gobiernos del mundo. Prueba de ello es la reciente reunión que tuvieron con ella representantes diplomáticos de Suecia, Noruega, Holanda, Dinamarca, Estados Unidos y Canadá. En esa oportunidad, además de expresarle su apoyo solidario, los funcionarios extranjeros condenaron las amenazas anónimas que ha recibido y destacaron su gestión al frente de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH); asimismo, se pronunciaron en favor de un adecuado presupuesto para el desarrollo de la misión constitucional de dicha institución.

Por su parte, los intregrantes del Consejo Centroamericano de Procuradores de Derechos Humanos --en una declaración oficial-- manifestaron lo siguiente: "queremos expresar nuestra preocupación ante la persistencia de las amenazas y hostigamientos de las que es objeto la Procuraduría, en general, y la señora procuradora en particular". Por tal motivo, solicitaron de las autoridades del Estado aplicar "todas las medidas necesarias para defender a una de sus instituciones de los ataques y amenazas de que es objeto"; asimismo, exigieron otorgar "a la Procuraduría --como se ha solicitado reiteradamente por la Federación Iberoamericana de Ombudsman (FIO), el Instituto Internacional de Ombudsman (IOI) y las declaraciones de las reuniones de los jefes de Estado Iberoamericanos-- los recursos presupuestarios suficientes para que pueda realizar eficazmente todas sus competencias y principalmente las de tutela, educación y promoción de los derechos humanos".

Finalmente, en la línea de los gestos positivos hacia la doctora Velásquez de Avilés, desde la llamada "sociedad civil" resalta el de David Escobar Galindo, quien entre otras cosas es miembro de su Consejo Consultivo. Síntesis de lo que la inmensa mayoría de personas piensa en este país al respecto, Escobar Galindo --muy fraternalmente-- le expresó lo siguiente: "Unas breves líneas para expresarte mi solidaridad en estos días difíciles. Tu trabajo y tu esfuerzo son la mejor credencial tuya, aquí y en el mundo".

Como se dijo antes, pues, el reconocimiento concreto de los organismos sociales y el IDHUCA se materializó al dedicarle el encuentro de promotoras y promotores. Mejor manera de hacerlo, no existe pues ese tipo de acciones se pueden realizar y tienen un sentido porque existe gente que, de forma desinteresada, trabaja por lograr que nuestro país cambie realmente. Hurgando en nuestro pasado reciente, podemos encontrar personas valiosas como monseñor Romero, Herbert Anaya Sanabria, Marianella García Villas y Segundo Montes que --al igual que tantas y tantos defensores anónimos-- dieron su vida por denunciar las injusticias y exigir el cese de la violencia.

Ahora, a casi seis años de haber terminado el conflicto armado, el trabajo de las y los promotores en derechos humanos continúa con igual o más intensidad que antes. Y es que hoy, además de ser agentes de denuncia, también les corresponde educar a la población para que ésta conozca, promueva y exija el respeto a sus derechos ante las instituciones estatales encargadas de velar por la seguridad y la integridad personal, la impartición pronta de justicia y la vida con dignidad.

Pese a que en forma falsa e inescrupulosa se les ha tildado de muchas cosas --que únicamente defienden a delincuentes, por ejemplo-- estas personas continúan luchando por llevar hasta el más apartado rincón del país, con humildad y sin afán de protagonismo, las herramientas necesarias para que toda la gente disfrute la realización de sus derechos y libertades fundamentales. Por eso, es importante rendir un merecido reconocimiento a las y los promotores de derechos humanos y apoyar su trabajo continúe dando frutos positivos. En esa línea, a continuación publicamos una síntesis de las principales conclusiones a las cuales se llegó durante la actividad que ahora nos ocupa.

En lo relativo a la situación de los derechos humanos en el país, se dijo que éstos no son respetados en su totalidad y que siguen siendo violados de diversas maneras: en lo económico, social, político, cultural y religioso. De forma destacada se habló de la negación de justicia, el desempleo y el aumento de muertes violentas así como de la discriminación y desvalorización de la mujer. En ese marco, desde la perspectiva de las y los asistentes al encuentro, las únicas organizaciones que promueven el respeto a los derechos humanos son las "no gubernamentales" y --por ello-- se habló de la necesidad de elevar los niveles de capacitación y tecnificación, con el objeto de enfrentar eficazmente el reto de lograr que la población apática o desconocedora de sus derechos pueda exigir su respeto.

En lo que toca a los mecanismos de defensa jurisdiccionales, se hizo referencia a instrumentos tales como la Constitución de la República y las leyes secundarias; también se mencionó la legislación internacional. De igual forma, se señaló la necesidad de impulsar procedimientos adecuados de seguimiento tomando en cuenta las características particulares de cada caso, para así poder brindar una buena orientación a cada víctima. Entre los vacíos detectados en este aspecto, fundamentalmente se encuentran la prepotencia, la burocracia, la indiferencia y la corrupción. Para superarlos, hay que trabajar en: concientizar al pueblo para que elija políticos honestos; incentivar sistemáticamente a las personas para que denuncien; insistir hasta que se resuelvan los casos; y verificar el funcionamiento de las instituciones del Estado.

Al hablar de las vías no jurisdiccionales o alternativas para la solución de los conflictos, se señalaron las siguientes carencias: falta de difusión de estos mecanismos y poca conciencia de las personas en relación a su efectividad, aunque también se destacó que los mismos resultan más accesibles para las y los promotores. En aras de superar tales vacíos, se debe socializar el conocimiento de dichos mecanismos entre las personas, mediante una labor articulada enfilada en tres sentidos: conciencia, educación y orientación.

Sobre el papel de las organizaciones no gubernamentales y de sus promotores y promotoras, se concluyó que en la actualidad los principales problemas que enfrentan son los siguientes: la población desconoce el rol que les corresponde jugar; los medios masivos de difusión contribuyen a desinformar sobre el papel de los mismos; ciertas declaraciones de altos funcionarios también ayudan a distorsionar aún más la percepción de los derechos humanos y de las instituciones que los promueven y defienden; se dice que el oficio de promotor es algo propio de de vagos y que es una actividad política para favorecer al Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN); la situación de los derechos humanos en el país continúa siendo difícil, pese a que a que se detectan algunas mejorías.

En el evento también se conocieron otras opiniones escuchadas entre la gente "común y corriente", que vuelven complejo el trabajo de las y los activistas, son las siguientes: "se involucran a los derechos humanos con la izquierda"; "los derechos humanos son de revolucionarios"; "se politizan las acciones"; "los delincuentes agarran poder"; "la doctora de Avilés sólo defiende delincuentes"; "los derechos humanos son una espina".

Ante eso, las y los promotores afirman que su trabajo es popular; que es cercano a las comunidades porque viven con ellas y comparten su misma realidad; que sus organizaciones son una esperanza; que se debe cuidar el proceso de paz; que hay que

difundir y educar en derechos humanos; que es necesario aclarar las noticias falsas --que se transmiten, con o sin mala intención, y llevar información veraz a la población a través de los medios; que se deben formar promotores y promotoras para vigilar las actuaciones de las instituciones estatales; que se debe mantener y fortalecer la unidad de acción; que se tiene que impulsar la orientación y organización de la población, para que sepa denunciar y defender sus derechos.

Sobre lo último --la organización de la población en grupos de promotores y promotoras-- se dijo que era una herramienta necesaria para mejorar la coordinación y cobertura a nivel nacional, a fin de tener mayor fuerza para el cambio y garantizar experiencias positivas en la relación con las y los demás compañeros. Además, se afirmó que sólo con la organización es posible generar mayores niveles de confianza en las comunidades; la organización abre las puertas a la oportunidad de realizar un trabajo eficaz de coordinación, especialmente en las áreas rurales del país. Organizarse también da fuerza, porque el promotor y promotora saben que no están solos y no se sienten temerosos.

Con el desarrollo de procesos organizativos --se concluyó en el evento-- se puede integrar una red nacional de promotores y promotoras de las diferentes comunidades y organizaciones de nuestro país que, durante años, han sido capacitados por diferentes instituciones. Eso, sin duda, sería uno de los logros más grandes en la materia ya que, así, adquiriría una fuerza considerable el movimiento de derechos humanos.

Como ya se dijo, lo anterior es sólo una síntesis de algunas de las conclusiones más importantes del encuentro. Es muy difícil recoger en estas líneas toda la riqueza del evento, sobre todo en lo relativo a las experiencias que se han desarrollado y a la potencialidad que existe en materia de defensa y promoción de los derechos humanos en este El Salvador de ahora. No obstante, ahí están las memorias del evento; pero, sobre todo, está la gente que lucha y mantiene viva la esperanza por alcanzar una sociedad justa, armoniosa y en paz.



Los aparatos ideológicos de la transnacionalización

Esteinou (1992) define como aparatos ideológicos aquellos instrumentos que sirven para la reproducción coyuntural del sistema. A través de ellos, la estructura global de la formación social alcanza su estabilidad autoritaria y vertical por medio de la acción cultural. Sobre éstos, dirá, se construye el soporte de la sociedad capitalista: la fuerza de trabajo asalariada y el sector subalterno en general.

Los aparatos ideológicos generan un proceso de conservación y reproducción de las formas capitalistas coetáneas a través del proceso de socialización. Este proceso, en una sociedad de clases, es una internalización de la ideología dominante de la sociedad. Siendo su objetivo la reproducción de las relaciones sociales de producción.

Según este autor, el aparato ideológico hegemónico ha ido cambiando respecto al desarrollo de la sociedad capitalista. El aparato ideológico hegemónico se caracteriza porque tiene un poder dominante en el subconsciente del individuo, debido a que en sus profundidades psíquicas se encuentran las representaciones de los conjuntos sociales. Por tanto, la hegemonía no se reproduce por la ación de un solo aparato, sino por un sistema complejo de instituciones o redes ideológicas, a través de múltiples acciones culturales.

Durante la etapa mercantilista, que va del año mil quinientos al mil seis cientos de nuestra era, la clase terrateniente basaba su riqueza en la forma de producción feudal . La iglesia, en ese entonces, se eregia en la institución encargada de integrar orgánicamente a la sociedad.

Con la secularización de la sociedad, la cual responde a la etapa premonopolista del capitalismo, que abarca desde el año mil seis cientos al mil ocho cientos, la escuela se convierte en el nuevo aparato ideológico hegemónico. Antonio Gramsci (ver Esteinou Madrid, Ibídem.) la considera como el principal aparato ideológico dominante del Estado Capitalista Moderno, porque ha terminado por reemplazar al antiguo aparato ideológico hegemónico. La Escuela contribuye a reproducir la fuerza de trabajo y colabora en la reproducción de la ideología dominante.

Con la llegada de la fase monopolista del desarrollo capitalista los medios de comunicación se han convertido en los nuevos aparatos de hegemonía dominante. Dentro de ella se encuentra la fase monopolista y colonialista, que va del año de mil ocho cientos cincuenta a mil novecientos veinte, la cual desarrolla el telégrafo y la prensa. En la actual fase transnacional, que comprende de mil novecientos veinte a mil novecientos ochenta, los medios de comunicación electrónicos ejercen una tarea cultural dominante. Ya que con la actual tecnología de información, los medios son una auténtica Escuela Electrónica, por el amplio proceso de educación cotidiana que ejerce sobre los individuos.

Los medios de comunicación masiva han convertido al estado convencional del siglo diecinueve en un estado geométricamente ampliado a través de su capacidad ideológica y de consenso. La amplia difusión ideológica permite dirigirse simultáneamente a millones de receptores heterogéneos, ubicados en regiones disímiles y polarizadas.

La función de los aparatos de difusión de masas es multisocializar la conciencia de los agentes sociales, en las etapas más elementales y primarias de su desarrollo. Para esto existen dos tipos de formaciones o reproducciones discursivas que contribuyen a mantener las relaciones dominantes: el discurso publicitario difunde la ideología de la satisfacción de las necesidades básicas y con ello realiza el ciclo de acumulación de capital y, mediante el discurso noticioso, distribuye la ideología de información objetiva, vinculada a los agentes sociales con las coordenadas culturales. Se aprecia, entonces, que el uso de los medios de difusión se ha vuelto indispensable, incluso en las campañas políticas, así como en momentos de crisis y de anarquía total.

La transnacionalizacion global

Según Guinsberg (1991), nos encontramos en la actualidad con un proyecto de dominación a nivel mundial por parte de las transnacionales, y su difusión y dimensión está a cargo de los medios electrónicos de comunicación.

La transnacionalización global implica transformaciones económicas, políticas y psíquicas. Pues todo marco social necesita construir determinado tipo de sujeto social u hombre, ya que un sistema que no tenga integrados psicológicamente a sus habitantes, es decir, cumpliendo conscientes o inconscientemente con sus normas, resulta infuncional y, por tanto, perecedero.

Los medios se han convertido en las instituciones hegemónicas de ideologización y socialización de las sociedades contemporáneas. De allí que su manejo posibilita, o al menos facilita, el control social y la colonización de conciencias. Por eso se otorga tanta importancia a su acceso y control.

Para construir este sujeto social u hombre necesario, las transnacionales han generado sustanciales cambios en los contenidos de las diferentes programaciones, los cuales van dirigidos a fomentar los proyectos neoliberales y transnacionales, representándolos como la única opción posible a todos los hombres y a todos los pueblos. Esto porque los patrones de acumulación de capital están exigiendo la construcción de un alma colectiva en base a una visión de la vida más cosificada y transnacionalizada.

Por tanto, la nueva subjetividad que fomentan los medios resalta el individualismo, la competitividad, el canibalismo salvaje, la marcada admiración por lo extranjero, el interés por la planificación no colectiva, la lucha por la libertad y la felicidad aislada, el valor supremo de la eficiencia y la tecnificación extrema.

El proyecto transnacional en el país

En nuestro caso, la recién aprobada Ley de Telecomunicaciones conducirá a la concentración de la información, siendo efecto secundario de la aplicación de tal ley la no consolidación de la democracia. Ya que la democratización de la comunicación es requisito indispensable para su vigencia.

La subasta de las ondas hertzianas, la propiedad temporal de las frecuencias, la transferencia del cinco por ciento de las ganancias al fisco y el otorgamiento, en su programación, de diez minutos semanales al gobierno, conducirá a que unas pocas corporaciones terminen controlando todo el sistema de información (ASDER, por ejemplo). De igual manera, reforzará la dominación del Estado sobre el sujeto social.

Lo que se pretende con ello, implícitamente, es reducir al público a la obediencia y alejarlo de la acción política. Para la Comisión Trilateral (organismo internacional de carácter privado donde participan hombres de negocios y políticos de los Estados Unidos, Europa y Japón), el dominio del Estado se encuentra obstaculizado por intereses especiales de la población en general (ver Chomsky, 1993). De allí que la transnacionalización tienda a eliminar progresivamente aquellos medios independientes, como las radios comunitarias, y toda forma de organización que interfiera el dominio del Estado, tal como se pretende con la ley de fiscalización de organizaciones no gubernamentales.

El discurso oficial pretende hacer creer que la esencia de la democracia es la libertad de las pocas corporaciones que controlan el sistema de información para persuadir y sugerir. Es decir, para controlar la mente pública.

Los propietarios de los medios de información masiva y sus financiadores (publicistas y políticos), quienes son fracciones de la misma clase dominante, son los que dictan el contenido y la programación de los mismos, con lo cual se promueve sistemáticamente un pensamiento unidimensional, que termina por producir, en los receptores, una mimesis con ese marco ideológico particular.

No extraña, entonces, que los representantes de la clase dominante tengan permeabilidad y capacidad participativa en ellos. No así los sectores subalternos, para quienes los medios son impermeables.

La propiedad privada de los medios de difusión masiva termina por condicionar la función cultural o transmisión de sus mensajes. Por tanto, toda actividad comunicacional está sujeta a intereses eminentemente políticos, incluso, la publicidad.

Los medios de comunicación buscan introyectar la ideología dominante, calificar las fuerzas de trabajo y lograr consenso de masa (la campaña a favor de la pena de muerte, ilustra lo que se es capaz con su manejo). Con lo cual articula la economía con la cultura, por medio de la reproducción del proceso productivo, y articula la política con la cultura, por medio de la legitimación política del proyecto de acumulación de capital.

Este proyecto transnacional, del cual el país es fiel copia, se caracteriza por ser autoritario y corporativo. Mediante los mensajes que transmiten los medios, se quiere conquistar conciencias que modifiquen la estructura caracterial y espiritual de la población del tercer mundo y hacer posible la integración de los mercados internacionales.

______________

Colaboración de José Guillermo Mártir Hidalgo, Comité Nacional de Salud Mental



Presentamos a continuación la segunda parte de los Estatutos del FMLN y las propuestas de reforma que fueron discutidas en la Convención Nacional Ordinaria, celebrada el 7 de diciembre de 1997

Estatutos del FMLN y propuestas de reforma (II)

Art.23.- Se llevará un Libro de Actas de la Convención Nacional el cual se iniciará con una razón en la que conste el número de hojas, [que estarán todas ellas selladas con el sello del Partido] todas ellas foliadas y con el sello del Partido. La razón será firmada por los miembros de la Dirección Política del Partido.

El asiento de las actas y custodia del Libro estará a cargo del Secretario de Actas [del Partido] de la Dirección Política Nacional. Las Certificaciones de las Actas serán firmadas por el Secretario de Actas o por el [Coordinador General del Partido] Presidente de la Dirección Política Nacional del Partido.

Art.24.- Son atribuciones de la Convención Nacional:

a) Reformar los Estatutos del Partido o aprobar uno nuevo;

b) Reformar la Carta de Principios y Objetivos del Partido, así como aprobar el Programa de Acción y de Gobierno [del Partido] del mismo;

c) Elegir [el Consejo Nacional] a los miembros de la Asamblea Nacional según lo establecido en [el Art. 26 de] los presentes Estatutos;

d) Alternativa "A":

Elegir al Presidente y dos Vicepresidentes de la Dirección Política Nacional, por votos secreto de entre los integrantes de la Asamblea Nacional que hubiesen sido electos para conformar la Dirección Política Nacional

Alternativa "B ":

Elegir al Presidente y dos Vicepresidentes; por voto secreto de entre los integrantes de la Asamblea Nacional

e) (ídem. actual "d") Conocer y resolver el informe presentado por la Asamblea Nacional;

f) (modifica actual "e") Elegir por voto secreto a los miembros propietarios y suplentes del Tribunal de Honor y de la Asamblea Nacional;

g) (ídem. actual "f") Decidir la participación o abstención del Partido en cualquier elección popular;

h) (ídem. actual "g") Elegir los candidatos del Partido a Presidente y Vicepresidente de la República;

i) (ídem. actual "h") Ratificar los candidatos a Diputados a la Asamblea Legislativa;

j) Ratificar los candidatos a Diputados al Parlamento Centroamericano;

k) (ídem. actual "i") Aprobar la Plataforma Electoral del Partido;

l) (modifica actual "j") Facultar [al Consejo Nacional] a la Asamblea Nacional para negociar y entrar en coaliciones con otros partidos;

m) Conocer de los asuntos importantes del Partido que le sean sometidos por [el Consejo Nacional] la Asamblea Nacional o que la misma Convención decida;

n) (modifica actual "l") Decidir la disolución del partido con el voto favorable de (tres cuartos) las tres cuartas partes de sus miembros;

o) (ídem. actual "m") Cumplir las demás atribuciones que le conceden los presentes Estatutos;

p) (ídem. actual "n") Resolver con apego a la Constitución Política y a las leyes de la República los casos no previstos en los presentes Estatutos, respetando el espíritu de los Principios y Objetivos del Partido.

Art. 25.- No obstante lo prescrito en los literales "g" y "h" del Artículo anterior, la Convención Nacional que se celebre el año anterior a cualquier evento electoral decidirá o no la participación del Partido en coaliciones; en caso que decida hacerlo, dará mandato a la Asamblea Nacional para que, en base a un Reglamento de Coaliciones, lleve a cabo las respectivas negociaciones; concluidas éstas los acuerdos serán ratificados del modo siguiente:

a) En Convención Nacional si se tratare de candidatos a Presidente y Vicepresidente de la República;

b) En Convención Departamental si se tratare candidatos a diputados por los departamentos;

c) En Asamblea Nacional si se tratare de candidatos diputados por la circunscripción Nacional Y Diputados al Parlamento Centroamericano;

El plazo para ratificar los acuerdos y candidatos de las coaliciones será, a más tardar, quince días antes a la fecha de inscripción de coaliciones en el Tribunal Supremo Electoral.

Si la Convención Nacional decidiera no participar en coaliciones procederá a ratificar a los candidatos que el Partido haya postulado.

CAPITULO III

[ DEL CONSEJO NACIONAL ]

DE LA ASAMBLEA NACIONAL

Art. 26.- (modifica el actual Art. 25) [El Consejo Nacional] La Asamblea Nacional es la autoridad máxima del Partido cuando no esté reunida la Convención Nacional. Ejerce la Dirección del Partido y responde ante la Convención Nacional por el cumplimiento de los acuerdos y resoluciones de ésta, así como de sus propias determinaciones.

Art.- 27.- (modifica actual Art. 26) [El Consejo Nacional] La Asamblea Nacional será [electo] electa por la Convención Nacional en un número no menor de cincuenta y dos miembros, elegidos para un período de dos años; y se integrará de la siguiente manera:

[ a) Con catorce miembros escogidos de entre las ternas que sean enviadas por las catorce Convenciones departamentales; b) Con seis miembros de entre las ternas enviadas por las Convenciones Departamentales con mayor proporción de afilados asistentes a las Convenciones Municipales; según el procedimiento establecido por la Secretaría Nacional da Organización; c) Con treinta miembros electos directamente por la Convención Nacional / Además formarán parte del Consejo Nacional el Coordinador de la Representación Parlamentaria y el coordinador del Consejo de Alcaldes]

a) Los catorce Coordinadores Departamentales;

b)Seis miembros de entre las ternas enviadas por las Convenciones Departamentales con mayor desarrollo del Partido según criterio aprobado por la Dirección Política Nacional;

c) Treinta miembros electos directamente por la Convención Nacional.

d) Los Coordinadores de las Representaciones Parlamentarias en la Asamblea Legislativa y en el Parlamento Centroamericano y tres miembros del Consejo de Alcaldes.

Art. 28.- (modifica el actual Art. 27) [El Consejo Nacional] La Asamblea Nacional se reunirá ordinariamente cada tres meses y extraordinariamente cuando lo convoque la [Comisión Política] Dirección Política Nacional del Partido. El quórum para sus reuniones será del sesenta por ciento de sus miembros. Las resoluciones se adoptarán con el voto afirmativo de la mitad más uno de sus miembros presentes, excepto en los casos de votación calificada previstos en estos Estatutos.

Art. 29.- (modifica actual Art. 28) La convocatoria para las reuniones ordinarias o extraordinarias [del Consejo Nacional] de la Asamblea Nacional se hará por escrito por el [Coordinador de la Comisión Política] Presidente de la Dirección Política Nacional expresándose el día, lugar y hora de la sesión y los puntos a tratar. La convocatoria se hará por lo menos con cinco días de anticipación

En las reuniones extraordinarias solo podrán tratarse los temas señalados en la convocatoria, salvo que el pleno decida tratar otros.

Art.- 30.- (modifica el actual Art. 29) [El Consejo Nacional] La Asamblea Nacional llevará un Libro de Actas en el que se asentarán los acuerdos tomados. Los asientos serán firmados por el [Coordinador de la Comisión Política] Presidente y por el Secretario de Actas de la Dirección Política Nacional, el libro será llevado por el Secretario de Actas, bajo cuya responsabilidad estará.

Art.- 31.- (modifica el actual Art. 30) Corresponde [al Consejo Nacional] a la Asamblea Nacional:

a) [Elegir de su seno a la Comisión Política; al Coordinador General y a los dos Coordinadores Adjuntos] Elegir de su seno a los miembros de la Dirección Política Nacional que no son electos directamente por la Convección Nacional

b) Elegir al Consejo Asesor;

c) (ídem. actual "b") Aprobar y reformar el Reglamento Interno del Partido;

d) (ídem. actual "c") Trazar la Línea Política del Partido;

e) (ídem. actual "d") Conocer los asuntos planteados en consulta por la Dirección Política Nacional;

f) Ratificar el Presupuestó Ordinario del Partido y conocer del Extraordinario;

g) (modifica actual "e") Conocer el informe [trimestral] semestral que deberá presentarle [la Comisión Política] Dirección Política Nacional y el Secretariado Ejecutivo Nacional sobre sus labores;

h) (ídem. actual "f") Elaborar la Plataforma Política del Partido qué deberá presentar a la Convención Nacional;

i) (ídem. actual "g") Convocar a la Convención. Nacional cuando lo considere necesario;

j) (ídem. actual "h") Preparar la Memoria Anual de Labores que debe presentar a la Convención Nacional;

k) (ídem. actual "i") Vigilar la legitimidad de las Convenciones Departamentales, sus acuerdos y elecciones;

l) (modifica actual "j") Aprobar el Reglamento [de la Representación Legislativa] de las Representaciones Parlamentarias del Partido, tanto a nivel Nacional como del Parlamento Centroamericano, nombrar o sustituir a sus Coordinadores, a propuesta de los Diputados del Partido.

m) (modifica actual "k") Nombrar a las personas que deban suplir las vacantes [del Consejo Nacional] de la Asamblea Nacional que se produjesen por cualquier motivo, hasta que sean electos los nuevos miembros por la próxima Convención Nacional;

n) (modifica actual "l") Conocer de las candidaturas para Diputados y Consejos Municipales electos por las respectivas Convenciones. Si [el Consejo Nacional] la Asamblea Nacional considera inconveniente para el partido alguna candidatura, lo hará saber a las respectivas Directivas Departamentales con expresión de motivos. La Directiva Departamental o Municipal podrá confirmar la candidatura con el voto de las dos terceras partes de sus miembros. En caso contrario, escogerá una terna para que de ella la Asamblea Nacional seleccione el respectivo candidato;

o) [Decidir, en última instancia la coalición con otros partidos políticos a propuesta de la Comisión Política siempre que la Convención Nacional fuese facultado para ello] Negociar las coaliciones con otros partidos políticos a propuesta de la Dirección política Nacional de conformidad a lo establecido en estos Estatutos;

p) (Modifica actual "n") Aprobar [el Reglamento Interno del Partido] el reglamento de la Convención Nacional, así como el suyo mismo;

q) (ídem. actual "ñ") Formar las Secretarías y Comisiones que considere necesarias;

r) (ídem. actual "o") Elegir a los Candidatos por la Circunscripción Nacional y al Parlamento Centroamericano;

s) (ídem. actual "p") Nombrar las ternas de candidatos a Magistrado Propietario y Suplente del Tribunal Supremo Electoral y los representantes del Partido ante la Junta de Vigilancia

t) (ídem. actual "q") Designar las Directivas Departamentales y Municipales provisionalmente, cuando éstas no hayan sido electas en las respectivas Convenciones o cuando éstas no se hubiesen realizado;

u) (ídem. actual "r") Cuando no se encuentre en sesión la Convención Nacional, resolver con apego a la Constitución de la República y las leyes, los casos no previstos en los presentes estatutos, respetando el espíritu de la Carta de principios y Objetivos del Partido

[Art. 31 Existirá las siguientes Secretarías: a) de Organización; b) de Asuntos Jurídicos; c) De Administración y finanzas; d) de Actas; e) de Asuntos Electorales; f) de Relaciones Internacionales. / Las Secretarias funcionarán por un período de un año.]

CAPITULO IV

[DE LA COMISION POLITICA]

DE LA DIRECCION POLITICA NACIONAL

Art. 32.- [La comisión Política estará conformada por un número de miembros que el Consejo Nacional determine, pero en todo caso no podrá ser conformada con un número menor de diez ni mayor de quince miembros, y ejercerán sus funciones por un período de dos años / El Consejo Nacional designará de entre los integrantes de la Comisión Política, con no menos de sesenta por ciento de los votos favorables de sus miembros un Coordinador General y dos Coordinadores Adjuntos. EL Primero será el Coordinador General del Partido y Presidente de la Convención Nacional. Ejercerán sus funciones por un período de un año.] La Dirección Política Nacional es el máximo organismo de dirección política del Partido a nivel nacional entre reunión y reunión de la Asamblea Nacional; Estará conformada por el Presidente y los dos Vicepresidentes que hayan sido electos en Convención Nacional y los demás miembros que la Asamblea Nacional determine, en un número no menor a diez ni mayor de quince miembros.

De entre sus miembros nombrará a los Secretarios

a) De actas;

b) De Asuntos Jurídicos ;

c) De Asuntos Electorales

[En las sesiones de la Comisión tendrán con derecho a voz Secretarios de las Comisiones de Asuntos Sociales, de la juventud y de la Mujer]

Art.-33.- Corresponde a la [Comisión Política] Dirección Política Nacional:

a) Examinar permanentemente la situación política económica y social del país y de Centro América, así como del entorno internacional, y [y decidir] desarrollar la Línea de Acción del partido, acordada por la Asamblea Nacional, emitiendo en forma permanente las directrices que considere necesarias;

b) Proponer a la Asamblea Nacional la adopción de un Programa de Acción y líneas políticas;

c) Presentar informes [al Consejo Nacional] a la Asamblea Nacional cuando ésta se lo solicite;

d) [Revisar el trabajo de las Comisiones creadas por el Consejo Nacional]) Dirigir el trabajo del Secretariado Ejecutivo Nacional, a través de uno de sus Vicepresidentes;

e) Ejecutar las tareas y desempeñar las funciones que la Convención Nacional o la Asamblea Nacional le delegue expresamente;

f) [Aprobar el presupuesto ordinario y los gastos extraordinarios presentados por la Secretaría de Administración del Patrimonio y Finanzas] Proponer a la Asamblea Nacional para su aprobación el presupuesto ordinario y extraordinario del Partido.

Art.34.- [La comisión Política podrá convocar a sus reuniones a miembros Consejo Nacional, que por su responsabilidad estén vinculados a la temática objeto de su discusión. /Llevará un libro de actas donde asentarán los acuerdos a que llegue. Los asientos serán firmados por el Coordinador General y el libro estará bajo el cuido del Secretario de Actas.] El quórum para las reuniones de la Dirección Política Nacional será de ocho miembros y sus decisiones se tomarán con el voto afirmativo de por lo menos ocho de sus miembros.

Art. 35.- Son atribuciones del [Coordinador de la comisión Política] Presidente de la Dirección Política Nacional :

a) Representar judicial y extrajudicialmente al partido, conjunta o separadamente con el Secretario de Asuntos Jurídicos;

b) Dirigir las reuniones de la Convención Nacional, de la Asamblea Nacional y de la Dirección Política Nacional y coordinar el trabajo práctico cotidiano de esta última;

c) Todas las demás atribuciones establecidas por estos Estatutos y por la Ley.

Art.36.- [Los Coordinadores Generales adjuntos] Los Vicepresidentes tendrán las mismas funciones y atribuciones del Presidente, por delegación o en defecto de éste y todas las demás atribuciones establecidas por estos Estatutos y por la Ley.

Art. 37.- Corresponde a los Vicepresidentes:

a) Uno de ellos dirigirá el Secretariado Ejecutivo Nacional el otro coordinará el trabajo político a nivel territorial.

b) Ejecutar todas las tareas y desempeñar las funciones que los organismos superiores les deleguen.

Art. 38. Corresponde al Secretario de Actas:

a) Llevar los Libros de Actas y Acuerdos de los organismos nacionales del Partido;

b) Extender en la forma prescrita por estos Estatutos las certificaciones de Actas y Acuerdos;

c) Las demás que le asignen las autoridades del Partido a nivel nacional y los presentes Estatutos.

Art. 39.- Corresponde al Secretario de Asuntos Jurídicos

a) Representar judicial y extrajudicialmente al Partido, conjunta o separadamente con el Coordinador de la Dirección Política nacional ;

b) Asesorar a todos los organismos del Partido en los asuntos jurídicos que se presenten;

c) Las demás que la asignen las autoridades del Partido y los presentes Estatutos.

CAPITULO V

DEL SECRETARIADO EJECUTIVO NACIONAL

Art. 40.- El Secretariado Ejecutivo Nacional, es el organismo que cotidianamente se encarga de Coordinar el trabajo de realización práctica de las políticas y líneas que acuerden la Asamblea y la Dirección Política Nacional. También tendrá como atribución coordinar con las Directivas Departamentales y Municipales la Integración de las Secretarías a nivel departamental y municipal.

Art. 41. - El Secretariado Ejecutivo y Nacional estará conformado por los responsables de las Secretarías que la Asamblea Nacional decida. Su funcionamiento se regirá en base a un reglamento especial aprobado por la Asamblea Nacional.

CAPITULO VI

(Modifica y amplía el contenido de los Artículos con tenidos en el Capítulo I del Título IV de los actuales Estatutos)

DEL TRIBUNAL DE HONOR

Art. 42.- (modifica actual Art. 63) El Tribunal de Honor estará integrado por [tres] cinco miembros propietarios y [tres] dos suplentes y conocerá sobre las faltas que den lugar a infracciones a la Carta de Principios y Objetivos y a los Estatutos y Reglamentos del Partido.

Los miembros del Tribunal de Honor serán elegidos por la Convención Nacional por voto secreto, para un período de dos años.

No podrán ser miembros del Tribunal de Honor los miembros [del Consejo Nacional] de la Asamblea Nacional, de Comisiones Nacionales, Directivas Departamentales y

Municipales, los candidatos a cargos de elección Popular, ni quienes sean funcionarios públicos en cargo de elección popular.

Art. 43.- (modifica los actuales Arts. 64 Y 65) Corresponde al Tribunal de Honor:

a) (modifica el literal "d" del actual Art. 65 ) [Elegir a su Presidente y nombrar su secretario] Elegir dentro de su seno a su Presidente, su Secretarlo y tres vocales.

b) (modifica actual "a" del Art. 65) Elaborar una propuesta de Reglamento Disciplinario [que deberá aprobar el Consejo Nacional] y otro sobre las normas de conducta para los miembros del partido en el ejercicio de cargos públicos, que deberán ser aprobados por La Asamblea Nacional;

c) Tramitar cualquier solicitud referente al Régimen Disciplinario;

d) Recomendar a la Dirección Política Nacional el otorgamiento de estímulos o reconocimientos a los miembros que más se destaquen en el cumplimiento de las responsabilidades que el Partido les ha asignado;

e) (ídem. "c" del actual Art. 65) Aplicar las sanciones que el Reglamento Disciplinario determine como de su competencia;