En el año 2018, las personas que habitaban en la finca Venecia en el municipio de Soyapango, fueron reubicadas en otro lugar, ya que el dueño del terreno donde se encontraban decidió venderlo para construir un centro comercial. Han sido tres años de trabajo arduo de la directiva de la mano de los miembros de la comunidad, trabajo que está dando sus frutos, y que tiene a su base una actuación transparente en su accionar. Una experiencia contada por la presidenta de la comunidad
Para nosotros como directiva de la comunidad siempre ha sido central hacer un manejo transparente en el uso de los recursos de los que disponemos como comunidad, eso nos ha ayudado mucho en la gestión de los proyectos que hemos ejecutado hasta el momento.
Lo anterior se evidencia en la transparencia que hay en la recolección y uso de los fondos con los que contamos, lo que ha permitido que los miembros de la comunidad nos tengan confianza, por lo que al momento de gestionar los proyectos, en donde siempre hay necesidad de aportar fondos de contrapartida, confían en que lo que nos han estado dando como cuota mensual, va a ser ocupado en eso. Esto también nos ha ayudado a que las instituciones confíen en el manejo que la ADESCO Villa Venecia hace de los fondos, ya que podemos amparar nuestra gestión con comprobantes, facturas, informes, que son elementos importantes de cubrir para las organizaciones que ejecutan los proyectos. Ya que hemos podido, desde el primer momento en que solicitamos apoyo ya en el nuevo lugar, poner como respaldo la forma en que hicimos las gestiones para el traslado de la comunidad.
Eso mismo nos fortaleció como directiva, ya que los miembros de la comunidad comprobaron que no les fallamos en la confianza que tuvieron para elegirnos como directivos.
Y es que estamos acostumbrados a hacer rendiciones de cuentas para que vean en dónde y en qué se gastan los fondos que tenemos como comunidad, los que se obtienen de las rifas, ventas de comida, excursiones o de los aportes que dan mensualmente.
Asimismo, contamos con una cuenta bancaria a nombre de la ADESCO, en donde los trámites de retirar fondos tienen que ser autorizados con tres firmas de miembros de la directiva, esto ayuda a que la comunidad esté clara en que esos fondos no se tocan a menos que sea para gastos que se hayan definido como ADESCO.
La importancia en la trasparencia no solo tiene que ver con lo económico sino con lo humano, ya que como directiva somos transparentes para trasladar la información de cosas que afectan a la comunidad, como la relacionada con algún proyecto que se haya gestionado con alguna institución, o que alguna institución nos haya llamado a algún directivo para ofrecer algún proyecto, Siempre se llama a asamblea y se explica lo que se ha hablado, para que vean que todo lo que estamos gestionando es para bienestar de la comunidad.
A veces hay razones que la gente desconfíe cuando solo ven que uno sale a reuniones y no saben de qué se trata. Actuar con transparencia tiene que ser el valor reconocido por cualquiera que llegue a la directiva, ya que tienen evidencia de que si se maneja de forma transparente no solo lo económico, sino lo humano, si todo lo que se habla fuera de la comunidad se traslada a todos los socios de acuerdo a como se ha hablado, esto ayuda a que haya mas confianza y al momento de solicitar fondos para cualquier necesidad que surja, la gente responda, porque saben que se va a destinar para lo que se solicita.
Con lo humano nos referimos a que no todo el accionar está en función de proyectos, sino también en atender cuando se solicita ayuda, por ejemplo, para cubrir gastos por la muerte de alguna persona de bajos ingresos, se decide ayudar y se hacen los recibos correspondientes, para que todo quede registrado.
Así mismo, se recogen alimentos o ropa para hacer alguna donación a personas que lo necesiten de comunidades cercanas, se toman fotos de lo que los socios dan, se hace la lista de quienes han donado algo y lo que han donado, y también se dejan anotados los nombres de quienes no han apoyado, es decir que todo queda registrado.
Para contar con fondos cada socio paga dos dólares mensuales, también se hacen ventas, donde todo lo que ingresa es para la comunidad. Si alguien no tiene los fondos para hacer la venta que le toca, la comunidad se lo da, y con lo que se vende se paga el préstamo que se ha hecho y la ganancia también se da a la comunidad, es decir que se aporta el trabajo de forma voluntaria.
Hasta el momento, a tres años que nos reubicamos en el lugar donde nos encontramos hoy, el manejar las cosas de forma transparente, tanto al interior de la comunidad como hacia fuera, con las instituciones que nos apoyan, ha permitido que a este momento contemos con los servicios de agua y energía eléctrica en cada casa, servicios sanitarios de lavar, viviendas permanentes, casa comunal y que nos encontremos en este momento ejecutando el proyecto que nos va a permitir contar con nuestras calles internas pavimentadas y canales para que el agua lluvia ya no inunde las casas.
En estos tres años hemos luchado y aprendido mucho, y reconocemos lo importante que es que directivos y comunidad caminen de la mano, en una relación basada en la confianza que da el que las personas que conforman la directiva actúen de manera transparente