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Las taras en el desarrollo territorial

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17/05/2021
José Miguel Martínez. Estudiante segundo año de Maestría en Desarrollo Territorial  

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Propiamente Schweinsteiger (2019) a propósito de la violencia explica las taras o dificultades que presenta su prevención, si bien su trabajo es en específico sobre ello, particularmente se considera que existe un símil con desarrollo territorial[1]. El presente ensayo recoge los enunciados generales sobre las taras y expone críticamente cómo estas taras son aplicables a desarrollo territorial.

En cuanto a desarrollo territorial fundamentalmente, aunque no de manera exclusiva, este hace referencia a un enfoque que visualiza un sistema complejo que se desenvuelve en espacios geográficos determinados[2] en donde los actores mediante sus acciones establecen dinámicas entre ellos y con respecto al ambiente que les configuran como particulares en relación con otros.

Ahora bien, Schweinsteiger (2019) determina que las taras que limitan la labor operativa de prevención de la violencia son cuatro, de forma general y sintética se enumeran de la siguiente forma: 1. la visión estratégica sobre el problema, 2. dispersión estratégica en el territorio, 3. limitada integración programática (especialización de los actores) y, 4. participación calificada de la población. A continuación, se expone cada una de ellas y se relacionarán a desarrollo territorial.

Cuando Schweinsteiger (2019) habla de la visión estratégica sobre el problema, la primera tara, hace referencia a que este no se ha terminado de entender y que por consiguiente lleva a la aplicación de ideas estratégicas erradas o limitadas. Cuando se habla de desarrollo territorial, todas las personas y actores tienen un punto de partida que a su criterio explica lo que es desarrollo y en consecuencia lo que falta para llegar al mismo[3]; esto no es diferente en actores un poco más complejos como las organizaciones comunitarias, entidades gubernamentales, organizaciones no gubernamentales e incluso cooperantes.

Imagen por https://etrasa.com/descoordinacion-comunidades-autonomas-normativa-transporte/

Por mencionar algunas formas de entender el desarrollo, unos lo harán -tozudamente- como crecimiento económico o participación en el mercado transando productos o bienes; otros le entenderán como la preservación del entorno natural sin consideración de la actividad humana moderna; habrá otros que lo entenderán como Derecho Humano y como el desarrollo está en el cumplimiento o no los derechos por parte del Estado. Lo esencial en esta primera tara es entender que diversos actores, al igual, que con la violencia suponen una idea de lo que debe hacerse en desarrollo, ideas que por sí solas son incompletas de cara a todo lo que abarca el desarrollo.

Sin percatarse de las carencias de su visión particular, los actores más o menos complejos no solo entenderán el fenómeno -ya sea prevención de la violencia o desarrollo- de forma particular, limitada y/o errada, sino que además se encargan de reproducir su visión del mismo, esto, es lo que Schweinsteiger (2019) entiende como la segunda tara: la dispersión estratégica en el territorio, en donde no existe coordinación entre los actores. A criterio particular, esta tara implica además una pequeña modificación al planteamiento original, la cual consiste en la imposibilidad de algunos actores de reflexionar sobre su misma práctica a partir de la observación de otros actores en coincidencia territorial. 

Subsecuentemente, a partir de lo planteado con anterioridad, emerge como resultado casi inexorable, la tercera tara: la limitada integración programática o especialización de los actores, la cual también explica la nula o limitada relación coordinada entre los esfuerzos de los actores territoriales a partir de su especificidad o de las capacidades desarrolladas por este en su comprensión del mundo y su visión del fenómeno.

Por último, la cuarta tara: la participación calificada de la población, expresa una incoherencia en sí, Schweinsteiger (2019) la entiende como la participación de los afectados por un problema “desde el análisis del problema, hasta la implementación de las decisiones” (P.6), sin embargo en la práctica esto no ocurre, o lo hace de manera limitada lo que termina condicionando la participación de la población por medio de instrumentos sin la generación de capacidades de la población que ha planteado beneficiar. Hablando propiamente de desarrollo territorial es posible encontrar actores en territorios cuyas ideas -fuertemente arraigadas, dispersadas y especializadas- opten por su ejecución a través de técnicos en vez de trabajar generando capacidades en torno a esas visiones.

Hasta este punto las taras en prevención de la violencia aplicadas a desarrollo territorial parecen describir ideas sólidas e inmodificables en territorio y tiempo, sin embargo, la misma noción de territorio desde el desarrollo territorial supera esta dificultad, pues los territorios son dinámicos en sí mismos, las relaciones se transforman y en consecuencia implican cambio para todo el sistema.

Las taras para el fenómeno en cuestión son identificables para los actores que incursionan en el territorio, o para los que están allí y visualizan desde un nuevo enfoque todo el territorio, sin embargo, esta reflexión sin su respectivo abordaje es incompleto, ya sea en desarrollo territorial o prevención de la violencia, es necesario compartir esta visión con el resto de los actores[4].

A criterio personal, Schweinsteiger (2019) deja importantes reflexiones aplicables a desarrollo territorial, lo que lleva a pensar que en efecto toda intervención en términos de desarrollo territorial implica un trabajo en prevención de la violencia e implícito en ello una transformación de las relaciones de los actores, esto incluye una transformación en las relaciones de quienes hacen desarrollo territorial puesto que las visiones de cada uno en su ejecución marcan el territorio.

Por último, es importante exhortar a la reflexión a partir de la evidencia empírica que realiza cada profesional del desarrollo territorial, sin esta reflexión localizada puntualmente en territorios determinados es imposible generar argumentos sólidos que al menos cuestionen las prácticas hasta ahora implementadas.

Referencias bibliográficas

Schweinsteiger (2019) Entender la violencia para prevenirla. Reflexiones críticas sobre el problema de la violencia en El Salvador. San Salvador. 

[1] Ha resultado interesante descubrir que lo planteado por Schweinsteiger (2019) tácitamente implica una comprensión de territorio en los términos propuestos por el desarrollo territorial.

[2] Cabe aclarar que los espacios geográficos constituyen solo una parte del territorio, en otras palabras, en este enfoque espacios geográficos y territorios no son sinónimos.

[3] Este entendimiento al que se hace referencia implica lo que en investigación se denomina ontología, epistemología y metodología.

[4] Schweinsteiger (2019) aporta una matriz de evaluación de programas en donde un cuadrante identifica las taras, a criterio particular, se puede complementar no solo con la dificultad, sino también con los actores en específico que reproducen dicha tara en similitud con el mapeo de actores.

 

Universidad Centroamericana José Simeón Cañas
Maestría en Desarrollo Territorial
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